Un absceso dental ocurre cuando la raíz de uno de tus dientes se infecta con bacterias y se acumula pus a su alrededor. También se le llama absceso periapical.
Síntomas
En algunos casos, el área alrededor del diente duele, pero no siempre. Si lo hace, generalmente es un dolor punzante y agudo, especialmente cuando ejerce presión sobre el diente. También podría extenderse hacia la mandíbula u otras partes de la cara del lado afectado.
Otros síntomas que puedes experimentar incluyen:
- Sensibilidad a las temperaturas frías o calientes
- Tener encías hinchadas
- Notar un mal olor cuando masticas con ese diente
Asimismo, si tienes hinchazón en la cara y fiebre, o tienes problemas para respirar o tragar, debes acudir de inmediato a una sala de emergencias. Es posible que la infección se haya diseminado a otras partes de su cuerpo.
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Causas
Este tipo de infección generalmente ocurre si una caries no tratada dejó una cavidad abierta o si se lesiona un diente. Las bacterias pueden entrar a través de la cavidad o mediante una astilla que agriete un diente y extenderse hacia la raíz.
Es más probable que tengas este tipo de problemas si no te cepillas los dientes al menos dos veces al día o si tu dieta incluye mucha azúcar. Los alimentos y bebidas azucarados ayudan a que las bacterias crezcan y eso puede provocar caries y otros problemas.
Diagnóstico
Un diente con absceso no desaparecerá por sí solo. Consulta a tu dentista de inmediato si tienes signos de este problema. Es importante tratarlo porque existe la posibilidad de que se extienda a la mandíbula u otras partes de la cabeza o el cuello. Esto es particularmente cierto si tu sistema inmunológico está débil debido a una condición de salud, como el VIH o el SIDA. Ciertos medicamentos, incluidos algunos tratamientos contra el cáncer, también pueden dificultar que tu cuerpo combata las infecciones.
Por ello, para saber si tienes un absceso, tu dentista probablemente hará lo siguiente:
- Revisará tus dientes. Si tienes un absceso, te dolerá cuando toque el diente afectado.
- Tomará una radiografía. Esto puede indicarle a tu dentista si tienes un absceso y si se ha extendido a otras partes de la boca.
Vía: WebMD
