Existen muchas recomendaciones sobre cómo debe ser una alimentación saludable para los niños. Por el contrario, al ámbito de las bebidas se le suele dar una menor importancia.

Aunque no lo parezcan, los padres de familia deben estar conscientes de que las bebidas que ingiere un niño repercuten directamente en la cantidad de calorías que se consumen, así como sobre la cantidad de calcio y azúcares que contiene su dieta.

Para los niños de todas las edades, los especialistas en salud recomiendan exclusivamente el consumo de dos bebidas: el agua y la leche. Estas son las mejores opciones de bebidas para cuidar la salud integral de los pequeños.

El agua carece de calorías, por lo que no representa aporte calórico alguno a la dieta de los niños. Además, su consumo frecuente enseña a los pequeños a aceptar una bebida apenas sin sabor y no azucarada para calmar la sed.

Por su parte, la leche es la mejor fuente de calcio para incluir en la alimentación de los niños. Debido a que un vaso de leche contiene cerca de 300 miligramos de calcio, esta bebida es un elemento fundamental que contribuye a las necesidades diarias de calcio de los pequeños.

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De acuerdo con especialistas, las recomendaciones en la ingesta diaria de leche, equivalentes lácteos o bebidas de soja enriquecidas con calcio, son:

-480 mililitros (aproximadamente 2 tazas) cada día en niños de 2 a 3 años de edad.

-600 mililitros (aproximadamente 2 tazas y media) cada día en niños de 4 a 8 años de edad.

-720 mililitros (aproximadamente 3 tazas) cada día en niños y adolescentes de 9 a 18 años de edad.

Lo ideal es optar por lácteos descremados o semidescremados. En caso de que a un niño no le guste el sabor de la leche, se puede probar añadiendo un toque de sabor a chocolate o fresa, por ejemplo.

Asimismo, los expertos no recomiendan que los niños consuman con frecuencia bebidas como:

-Jugo natural.

-Bebidas elaboradas con jugo de frutas.

-Bebidas deportivas.

-Refrescos.

Esta clase de líquidos favorecen la acumulación de calorías, carecen de valor nutritivo y contienen cantidades elevadas de azúcar, lo que se asocia al desarrollo de caries.

En el caso de los jugos, los expertos recomiendan que su consumo se limite a jugos de frutas naturales al 100% y a las siguientes cantidades:

-Nada de jugos hasta los 6 meses de edad.

-Máximo 120 mililitros al día en niños de 6 a 12 meses de edad.

-Máximo 180 mililitros al día en niños de 1 a 6 años de edad.

-Máximo 360 mililitros al día en niños de 7 a 18 años de edad.

 

Vía: Kid’s Health