Millones de personas en todo el mundo viven con un marcapasos que regula los latidos de su corazón.

Los marcapasos pueden salvar la vida de pacientes cardíacos al prevenir afecciones como la bradicardia o frecuencia cardíaca lenta. Desde la invención del marcapasos en 1960, se han ido realizando mejoras en su tecnología original. Hoy en día, los investigadores se encuentran desarrollando dispositivos de tecnología avanzada, como marcapasos sin cables, marcapasos tan pequeños que no requieren cirugía e incluso marcapasos que pueden disolverse una vez que ya no son necesarios.

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El tipo de marcapasos utilizado dependerá del problema cardíaco del paciente. Los marcapasos contienen de uno a tres cables que se conectan a los ventrículos o aurículas, que son las cámaras del corazón. Los tipos de marcapasos incluyen los siguientes:

  1. Marcapasos unicamerales: estos dispositivos poseen un cable conectado a una cámara del corazón. Tratan afecciones como la bradicardia.
  2. Marcapasos bicamerales: estos dispositivos cuentan con dos cables, uno conectado a la aurícula derecha y otro al ventrículo derecho. Tratan afecciones como bloqueos auriculoventriculares (interrupción parcial o completa de los impulsos eléctricos desde las aurículas a los ventrículos).
  3. Marcapasos biventriculares: Estos dispositivos poseen tres cables, uno conectado a la aurícula derecha y los otros dos a las cámaras inferiores. Se utilizan para tratar afecciones más avanzadas como la insuficiencia cardíaca.

 

Fuente: Health Day