La fibrilación auricular (AFib, por sus siglas en inglés) es el tipo más común de arritmia cardíaca. Esta ocurre cuando las cámaras superiores del corazón, llamadas aurículas, laten rápidamente y no están sincronizados con las cámaras inferiores del corazón, conocidas como ventrículos, lo que puede provocar acumulación de sangre y complicaciones graves, como coágulos de sangre, eventos cerebrovasculares e insuficiencia cardíaca.
La fibrilación auricular paroxística es un tipo de Afib cuyos episodios ocurren de forma intermitente y pueden durar menos de siete días. Esta suele aumentar el riesgo de desarrollar otros episodios de latidos cardíacos irregulares.
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Los síntomas de la fibrilación auricular paroxística son los mismos que los síntomas de la AFib común. Estos pueden variar, por lo que es posible que tengas síntomas distintos cada vez que experimentes la aparición de dicha arritmia. Los síntomas más frecuentes de AFib incluyen los siguientes:
- Palpitaciones
- Fatiga
- Dificultad para respirar
- Molestias en el pecho
- Aturdimiento
En raras ocasiones, algunas personas pueden perder el conocimiento. En otros casos, las personas con AFib no presentan ningún síntoma.
Si deseas saber más sobre esta afección, consulta a tu médico.
Fuente: Very Well Health
