De acuerdo con el doctor Guillermo Hidalgo, nefrólogo pediátrico en Hackensack Meridian Health, los niños pueden desarrollar presión arterial alta, lo que a su vez puede significar una variedad de cosas. En el caso de los niños pequeños, podría ser un síntoma que indique otro problema de salud, como una enfermedad renal, un defecto cardíaco o trastornos hormonales, o puede ser el resultado de otros factores de riesgo genéticos o ambientales.
La obesidad es el factor de riesgo más común para que los niños desarrollen presión arterial alta. Otros factores de riesgo incluyen:
- Antecedentes familiares de presión arterial alta.
- Exposición al humo de segunda mano.
- Anomalías hormonales.
- Trastornos del sueño, como la apnea del sueño.
La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los pediatras realicen exámenes de presión arterial a los niños en sus revisiones anuales.
Hidalgo recomienda medir sus niveles de presión arterial y analizar varios factores como su peso, género y hábitos de estilo de vida. “Para la mayoría, no hay síntomas que indiquen un problema, por lo que es importante realizar estos controles de forma rutinaria”, indicó.
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«Lo primero en un plan de tratamiento es identificar si existe una causa subyacente, como un trastorno del sueño o un desequilibrio hormonal; querremos tratar ese problema de referencia. En segundo lugar, debemos abordar cualquier cambio en el estilo de vida que pueda ser la causa, como la dieta y el nivel de condición física”, añadió el experto.
Con base en lo anterior, algunos consejos para que los niños mantengan un corazón saludable incluyen los siguientes:
- Comer una dieta saludable de frutas y verduras y tratar de reducir el consumo de sal.
- Priorizar la actividad física.
- Mantener un peso saludable.
- Padres deben proteger a sus hijos(as) del humo de segunda mano.
“Los padres deben participar en estos cambios de estilo de vida; será bueno para ellos y ayudará a que sus niños se mantengan encaminados hacia tales metas”, subrayó Hidalgo.
También existen medicamentos que permiten controlar la presión arterial alta en los niños. Consulta a tu médico sobre cuáles debería utilizar tu menor si ella/él los recomiendan dentro del plan de tratamiento.
Fuente: Hackensack Meridian Health
