A veces, sufrir dolor de espalda puede ser insoportable. Cuando es así, quizás sería una buena idea hacerse un estudio de imagen como una radiografía, una tomografía computarizada o una resonancia magnética, a fin de encontrar la causa, así lo aconseja Choosing Wisely Canada, portal de la Universidad de Toronto y la Asociación Médica de Canadá.
Es recomendable hacerse alguno de estos estudios si tu espalda muestras signos de daño nervioso severo o que está empeorando, o un problema subyacente grave como cáncer o una infección espinal. Según el portal, las “banderas rojas” que pueden alertar a tu proveedor de atención médica de que este examen debe realizarse incluyen:
- Un historial familiar de cáncer.
- Pérdida de peso inexplicable.
- Fiebre.
- Infección reciente.
- Pérdida del control del intestino o la vejiga.
- Reflejos anormales.
- Pérdida de potencia muscular o de sensación en las piernas.
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RECUERDA: Si ninguno de estos síntomas adicionales está presente, probablemente no requieras un estudio de imagen. El mejor enfoque sería seguir las medidas de cuidado personal que te recomiende el médico. También ten en cuenta que el dolor de espalda suele ser recurrente y es típico que sus síntomas aparezcan y desaparezcan de manera intermitente. Esto no significa que algo esté realmente mal, pero es la forma en la que se comporta la mayoría del dolor de espalda.
