Junto con la gripe, esta es la época del año durante la cual se manifiestan las infecciones de los senos nasales, que vienen de la mano con las ya usuales narices congestionadas, mocos y orejas tapadas.
La mayoría de estas infecciones son causadas por virus, pero las bacterias también pueden ser las culpables, así lo indica la doctora Jessica Grayson, profesora asistente de otorrinolaringología en la Universidad de Alabama en Birmingham (Estados Unidos).
«Cuando las personas dicen tener presión sinusal, puede significar congestión nasal», señaló Grayson. «La congestión bilateral podría significar que una persona tiene una infección viral o una reacción alérgica. Las infecciones virales no escogen únicamente un lado».
Si tu presión sinusal se encuentra aislada (restringida a un solo lado), es posible que tengas una infección bacteriana, y eso significa que necesitas ver a un médico y, probablemente, requieras un antibiótico, dijo la especialista. Sin embargo, tomar demasiados puede causar efectos negativos en el sistema inmunitario.
«Con un virus», agregó Grayson, «solo hay que dejar que continúe su curso».
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Opciones que pueden ayudar
Pero un descongestionante nasal puede ayudar. Grayson recomienda utilizarlo por la noche y durante no más de tres o cuatro días seguidos. Usarlo por más tiempo aumenta el riesgo de sufrir congestión de rebote. «Esto inicia un círculo vicioso de volverse adicto al uso del producto», advirtió. .
El uso de irrigación salina o una olla Neti también permite lavar los conductos nasales, afirmó Grayson. No obstante, durante los primeros días de infección es ineficaz porque la nariz suele estar demasiado hinchada. Asimismo, los esteroides nasales pueden ayudar a reducir la inflamación.
Y no hay que olvidar que también es la temporada de gripe. «Vacúnate», recomendó Grayson. «Incluso si contraes la gripe, la vacuna todavía puede ayudarte con la gravedad de los síntomas».
Además, resaltó que comer vegetales crucíferos como el brócoli, las coles de Bruselas, las acelgas, la col rizada y la coliflor puede ayudar a prevenir las infecciones virales. «Preparar un licuado con col rizada y un poco de brócoli puede ser muy útil», aseguró Grayson.
Si pierdes el sentido del olfato después de un resfriado o una infección bacteriana, consulta de inmediato a un médico, aconsejó. El tratamiento puede incluir suplementos de zinc y ácido lipoico, y posiblemente, un reentrenamiento de tu sentido del olfato.
Vía: Health Day News