Las inyecciones de insulina hacen que las células del cuerpo absorban más glucosa del torrente sanguíneo. Como resultado, tomar demasiado o administrar una inyección en el momento equivocado puede provocar una caída excesiva del azúcar en sangre.

Si el nivel de azúcar sanguínea de una persona baja demasiado (hipoglucemia), puede experimentar síntomas que incluyen los siguientes:

  • Mareo
  • Problemas para hablar
  • Fatiga
  • Confusión
  • Piel pálida
  • Transpiración
  • Músculos contraídos
  • Convulsiones
  • Pérdida de consciencia

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RECUERDA: Llevar un programa estricto de insulina es esencial para mantener los niveles de azúcar en sangre dentro de un rango saludable. Un médico puede recetar insulinas que actúan a diferentes velocidades para mantener más consistentes los niveles de glucosa en sangre de una persona.

Quienes poseen riesgo de hipoglucemia deben llevar un brazalete médico que indique su tipo de diabetes, además de otra información necesaria, como por ejemplo si controlan su padecimiento con insulina.

Tales pulseras brindan información a los socorristas y profesionales médicos en caso de que una persona pierda el conocimiento.

 

Fuente: Medical News Today