Un nuevo estudio demuestra que el poder del ejercicio influye en la disminución significativa de 13 tipos de carcinomas, algunos de ellos en sus formas más letales.
De acuerdo con la investigación, en la que se observó a 1.4 millones de adultos, ejercitarse reduce el riesgo de cáncer de mama, colon y pulmón.
“El riesgo de cáncer parece seguir declinando a medida que se aumentan las horas de actividad física, sin un tope aparente”, comentó Steven Moore, especialista del Instituto Nacional del Cáncer de E. U.
Los otros tipos de cáncer fueron: leucemia, mieloma —cáncer en la sangre que comienza en la médula ósea—, cánceres de esófago, hígado, riñón, estómago, endometrio, recto, vejiga, cabeza y cuello.
En general, un nivel más alto de actividad física se asocia con un riesgo 7% más bajo de cáncer, según los investigadores.
Conoce más: 10 beneficios del ejercicio en pacientes con cáncer
El rango de reducción tuvo variaciones, desde un 42%, para el cáncer de esófago, hasta un 10%, para el cáncer de mama. En cuanto al cáncer de colon y de pulmón, el riesgo se redujo hasta 16 y 26%, respectivamente.
«Esto sugiere que la actividad física podría tener un rol en los esfuerzos poblacionales de prevención del cáncer», dijo Moore.
El estudio indicó que la actividad física reduce los niveles de hormonas vinculadas a distintos tipos de cáncer —como el estrógeno— y ayuda a controlar los niveles de insulina y el factor de crecimiento insulínico.
A su vez, las células parecen sufrir menos estrés oxidativo, y ser más capaces de reparar el ADN dañado que podría provocar la afección.
Vía: Health Day