Una investigación reciente sugiere que las personas que son dependientes del alcohol, sobre todo las mujeres, podrían reducir su vida aún más que los fumadores.
En el estudio, investigadores alemanes hallaron que las tasas de muerte son 4.6 veces más altas entre las mujeres dependientes del alcohol y 1.9 veces más altas entre los hombres dependientes del alcohol, en comparación con la población general.
«Este trabajo confirma la bien conocida asociación entre el alcoholismo y la muerte prematura», señaló el Dr. James Garbutt, profesor en psiquiatría de la Universidad de Carolina del Norte. «También respalda la evidencia de que las mujeres son más propensas a tener problemas graves de salud con el alcohol que los hombres, o sea que enferman más y más rápido», explicó.
Más de 4 mil casos estudiados
El informe aparece en la edición en línea del 16 de octubre de la revista “Alcoholism: Clinical & Experimental Research”. Para el estudio liderado por Ulrich John, director del Instituto de Epidemiología y Medicina Social de la Universidad de Medicina Greifswald, los investigadores recolectaron datos sobre más de 4,000 hombres y mujeres incluidos en un registro alemán, y les dieron seguimiento durante 14 años. Entre esas personas, 153 fueron identificadas como dependientes del alcohol.
“La edad media de muerte era de 60 años para las mujeres”
«En primer lugar, hallamos que las tasas de muerte anualizadas eran 4.6 veces superiores entre las mujeres y 1.9 veces superiores entre los hombres, en comparación con la población general de la misma edad y sexo», comentó John en una declaración.
«En segundo lugar, hallamos que la edad media de muerte era de 60 años para las mujeres y 58 para los hombres, ambas alrededor de 20 años menos que la edad media de muerte en la población general», añadió. «Ninguno de los fallecidos había alcanzado la edad de la esperanza de vida».
«En tercer lugar, haber participado en un tratamiento de dependencia del alcohol como paciente interno no se relacionó con una supervivencia mayor en comparación con no haber participado en el tratamiento, lo que indica que no pareció tener un efecto protector suficiente contra la muerte prematura», señaló John.
Beber parece contribuir más a la muerte prematura que otros factores de riesgo, como fumar, anotó.
Las muertes relacionadas con el tabaquismo con frecuencia se deben a cánceres, que usualmente ocurren más adelante que las muertes por abuso de alcohol. Además, beber puede contribuir a otros factores de riesgo como fumar y la obesidad, apuntó Ulrich John.