Es difícil predecir si entrarás en trabajo de parto prematuro, sobre todo si estás sana. La mayoría de los partos prematuros ocurren por sí solos y no tienen explicación.
La presencia de ciertos gérmenes en la orina (incluso sin signos de infección) parece aumentar la probabilidad de un parto prematuro. El tratamiento de la infección parece reducir el riesgo de dicho parto.
Otros factores de riesgo por los que el parto podría comenzar demasiado pronto son los siguientes:
- Haber tenido un parto prematuro antes
- Tener una mala alimentación o mala salud
- Fumar o consumir sustancias recreativas
- Tener mucho estrés o violencia en tu vida
- Estar embarazada de gemelos o más bebés
- Infecciones generales
- Sangrado de la placenta
- Problemas con el cuello del útero (cérvix)
- Problemas con el útero, como fibromas
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Algunas mujeres inician el parto antes de tiempo y deliberadamente a través de sus médicos, ya que en ocasiones es mejor que el bebé nazca y no permanezca en el útero. Algunas de las razones para realizar esto incluyen:
- La presión arterial de la mujer es demasiado alta (preeclampsia)
- Hay sangrado de la placenta
- El bebé no está creciendo
Recuerda que, si alguno o todos estos riesgos se aplican a tu caso, todavía existe la posibilidad de que tengas un embarazo a término. Y si no presentas ninguno de estos riesgos, incluso es posible que tengas un parto prematuro.
Fuente: Better Health Channel
