Los nacimientos que son poco o moderadamente prematuros podrían aumentar el riesgo de que estos niños tengan problemas de desarrollo, así lo dio a conocer un nuevo estudio publicado en la revista BMJ.
Los bebés prematuros a menudo tienen problemas de desarrollo, pero las investigaciones previas se han centrado en los nacimientos extremadamente prematuros (22-26 semanas de gestación), por lo que se sabe menos sobre los niños que nacieron moderadamente y muy prematuros (27-34 semanas de gestación). El tiempo promedio de gestación a término es de 39 a 40 semanas.
Para obtener más información, los investigadores observaron a más de 3,000 niños mayores de 5 años en Francia que nacieron después de las semanas 24-26, 27-31 y 32-34 de gestación y los compararon con un grupo de 600 niños nacidos a término.
Después de ajustar por otros factores, los expertos determinaron que entre más prematuros eran los niños, mayores eran sus tasas de discapacidades del desarrollo neurológico —como parálisis cerebral, ceguera y sordera— y de tener una función cerebral más baja.
La asistencia en la escuela fue utilizada por 27%, 14% y 7% de los niños nacidos a las 24-26, 27-31 y 32-34 semanas, respectivamente. Cerca de la mitad de los niños nacidos entre las 24 y 26 semanas recibieron al menos una intervención de desarrollo, en comparación con aproximadamente una cuarta parte (26%) de los nacidos entre las 32 y 34 semanas.
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De acuerdo con los resultados, el comportamiento fue la preocupación más comúnmente reportada por los padres de los niños estudiados. También encontró que las tasas de discapacidades del desarrollo neurológico eran más altas en las familias más pobres.
Este es un estudio observacional, por lo que no puede establecer la causa, indicó la autora del estudio Véronique Pierrat, del Hospital Tenon, Equipe EPOPé, en París, Francia.
No obstante, los hallazgos muestran que el parto prematuro «continúa representando una gran carga para las familias, la atención médica y los sistemas educativos», agregaron Pierrat y sus colegas.
También destacaron que, si bien las tasas de discapacidades del desarrollo neurológico de moderadas a graves disminuyeron con el aumento de la edad gestacional, alrededor del 35% de los niños cuyos nacimientos fueron de moderados a extremadamente prematuros mostraron discapacidades leves que requerían cuidados especiales o servicios educativos.
Muchas madres y padres expresaron preocupaciones sobre el desarrollo de sus hijos, especialmente las relacionadas con el comportamiento. Los investigadores concluyeron que las dificultades «que enfrentan estos grupos de niños y sus familias no deben subestimarse».
Vía: Health Day News
