La terapia de masaje consiste en frotar los tejidos blandos del cuerpo, incluida la piel y los músculos. Los masajistas suelen aplicar presión con las manos, pero también pueden utilizar los antebrazos, los codos o los pies. Algunas personas creen que el masaje funciona porque el tacto es curativo. El tacto también transmite una sensación de cariño, así lo indica el Sistema de Salud de la Universidad de Michigan (Estados Unidos).
Las mujeres embarazadas pueden usar la terapia de masaje para relajarse y ayudar a aliviar la tensión muscular y el dolor. Sin embargo, para que el masaje sea seguro durante el embarazo, debes asegurarte de:
- Decirle a tu masajista que estás embarazada.
- Evitar los aceites de aromaterapia, algunos de los cuales pueden ser peligrosos durante el embarazo.
- Evitar el masaje de tu vientre. Esto porque el masaje firme del vientre de una mujer embarazada puede provocar graves complicaciones durante el embarazo.
- Hablar con tu masajista sobre la posición de tu cuerpo durante el masaje. Hay tablas especiales que puedes usar durante el embarazo.
- A medida que avanza tu embarazo, las mejores posiciones para ti incluyen sentarte en una silla o taburete o recostarte de lado (el lado izquierdo es mejor más adelante en el embarazo) durante tu masaje.
- A partir de la mitad del embarazo, evitar acostarte boca arriba. Esto evitará que el peso adicional presione el vaso sanguíneo principal llamado vena cava.
- Después de las 12 semanas de embarazo (o mucho antes si está embarazada de gemelos o más), evitar acostarte boca abajo para no aumentar la tensión y la presión sobre el útero y la espalda baja.
RECUERDA: Debes asegurarte que tu terapeuta de masajes esté especialmente capacitado(a) en masajes para embarazadas y esté certificado(a) por tu país, estado o un organismo nacional. Esto asegura que tu masajista tenga un cierto nivel de entrenamiento y use ciertas pautas de práctica basadas en evidencia médica.
Fuente: University of Michigan Health
