Una de las mayores preocupaciones en el campo del cuidado al Medio Ambiente es definitivamente el ahorro de energía, nosotros podemos hacer nuestra labor de una manera muy sencilla: utilizando focos ahorradores.
Con respecto a los focos tradicionales que todos conocemos, los focos ahorradores ofrecen la misma iluminación que dan los focos tradicionales, pero tienen el valor agregado de que tienen un menor consumo de energía eléctrica, lo que genera un ahorro bastante significativo en la economía de las familias.
Los focos ahorradores de 23 watts tienen una iluminación igual a la de los focos tradicionales de 100 watts, y ofrecen además una vida útil de 10 mil horas, dos años de garantía y tienen una emisión de calor considerablemente menor que los focos tradicionales.
Para comprar focos ahorradores de calidad deberás cerciorarte que cuenten con el sello del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE) dependiente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en su versión A, este se otorga a los equipos electrónicos que tienen un manejo eficiente de reducción de energía, entre los productos que tienen el Sello FIDE A están precisamente los focos ahorradores.
Los focos ahorradores representan una gran ventaja costo-beneficio para el consumidor, ya que si bien los focos ahorradores llegan a ser más caros que los focos tradicionales, a largo plazo representan un gran ahorro de energía eléctrica para los consumidores, pues estos focos tienen una mayor vida útil porque gastan bastante menos energía que los focos que ya conocemos y de paso le hacemos un gran favor al Medio Ambiente al emitir menos contaminación y utilizar menos recursos.
Así que recuerda: los focos ahorradores son los mejores amigos de nuestro Medio Ambiente.
Vía: Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE)