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El yoga puede ayudar a aliviar problemas digestivos al disminuir el estrés, aumentar la circulación y promover la motilidad intestinal. Sin embargo, los científicos necesitan realizar más investigaciones para comprender su papel en problemas digestivos específicos.

A continuación te mencionamos dos posturas de yoga que pueden ayudar a promover una mejor digestión:

1. Flexión lateral sentada (Parsva Sukhasana)

Este es un excelente movimiento para principiantes que buscan estirar los oblicuos, los músculos abdominales, la parte inferior y superior de la espalda y los hombros.

El estiramiento suave puede ayudar a aliviar la hinchazón y los gases, así como favorecer la digestión general.

Cómo hacerla:

  • Siéntate en el suelo con las piernas cruzadas, con las manos tocando el suelo a los costados.
  • Levanta el brazo izquierdo en el aire y luego inclínate suavemente hacia el lado derecho.
  • Mantén el antebrazo derecho en el suelo, mirando hacia afuera.
  • Inhala y exhala lentamente 4 o 5 veces. Después, cambia de lado y repite.

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2. Giro sentado (Ardha Matsyendrasana)

Se cree que esta postura promueve la regularidad intestinal al ayudar al intestino delgado y grueso en la peristalsis. Este es el movimiento que impulsa los alimentos y los desechos a través del tracto gastrointestinal.

Dicha postura de yoga también puede ayudar a aliviar la hinchazón.

Cómo hacerla:

  • Siéntate en el suelo, con ambas piernas estiradas. Dobla la rodilla izquierda y cruzala sobre la rodilla o el muslo derecho, colocando el pie izquierdo en el suelo. Mantén el pie izquierdo plantado durante todo el movimiento.
  • Posteriormente, inclínate suavemente sobre la cadera derecha y dobla la rodilla derecha de modo que la planta del pie derecho mire hacia adentro, hacia el glúteo izquierdo. Si esto te resulta demasiado difícil, puedes mantener la pierna derecha estirada.
  • Toma el codo derecho y colócalo en la parte exterior de la rodilla izquierda mientras giras suavemente el tronco hacia la izquierda. Coloca la palma de la mano izquierda en el suelo a la izquierda de los glúteos.
  • Gira el cuello de modo que quede ligeramente mirando por encima del hombro izquierdo.
  • Mantén esta posición y respira profundamente durante 4 o 5 respiraciones. Con cada respiración, podrás notar que la columna se alarga. Después, cambia de lado y repite.

 

Fuente: Healthline