Si prefieres utilizar productos alternativos al trigo, por gusto personal o enfermedad celíaca, esta técnica es ideal para ti. Entre sus puntos a favor está su costo, el cual resulta muy bajo en comparación con las harinas especiales para celíacos u otros productos con una cantidad mínima de gluten.
Te recomendamos recurrir a la avena tradicional y no a la instantánea, pues la textura de la harina será distinta y no servirá de igual forma. Considera que la avena no es un producto completamente libre de gluten, al contener una proteína llamada avenina.
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Ingredientes
- Copos de avena tradicional.
- Licuadora o procesador de alimentos.
Instrucciones
- Lo ideal es disponer de una licuadora de alta potencia por su facilidad de uso; sin embargo, puedes utilizar cualquier procesador de alimentos, aunque el proceso será un poco más lento, y la harina no tan fina.
- La cantidad deberás estipularla en función de tus necesidades. Introduce los copos en el recipiente de la licuadora y pulverízalos durante dos minutos a máxima potencia.
- Si vas a usar una batidora, incorpora los copos de avena en un recipiente de borde alto. Cubre la parte superior con papel film para evitar que la harina salte. Luego, bate a velocidad media-alta hasta que esté lo más fina posible.
¡Disfruta!
Vía: UnComo.com