El primer parto puede significar una gran emoción para las mujeres que son madres por primera vez, pero también podría propiciarles una condición que quizás requiera que crucen las piernas al toser o estornudar.
Un estudio publicado en la revista JAMA encontró que las mujeres que dieron a luz a su primer bebé por cesárea tenían la mitad de riesgo de desarrollar incontinencia urinaria por esfuerzo (que hace que gotees orina al toser o estornudar) o vejiga hiperactiva, en comparación con las madres primerizas que tuvieron un parto vaginal espontáneo.
El hallazgo se basó en información sobre el primer parto de más de 1,500 mujeres. De ellas, 778 tuvieron una cesárea y 565 tuvieron un parto vaginal espontáneo. Las 185 restantes tuvieron lo que se conoce como un parto vaginal quirúrgico, o uno en el que el médico tuvo que usar fórceps u otro dispositivo para dar a luz a un bebé por vía vaginal.
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Los investigadores dieron seguimiento a las mujeres durante un período de nueve años para determinar si desarrollaron trastornos del suelo pélvico. El suelo o piso pélvico es un grupo de músculos y tejido conectivo en forma de cuenco en tu pelvis, el cual sostiene tus órganos internos. Cuando esas estructuras están débiles o lesionadas, una mujer puede experimentar incontinencia urinaria, dolor y otros problemas.
Además de tener una menor incidencia de incontinencia por esfuerzo y vejiga hiperactiva, las mujeres que tuvieron una cesárea también mostraron un 70% menos riesgo de experimentar prolapso de órganos pélvicos, en comparación con el grupo de parto vaginal. En esta afección, el cuello uterino y el útero caen desde la cavidad pélvica hacia el espacio vaginal.
Es importante señalar que los trastornos del suelo pélvico se pueden tratar. Los ejercicios de Kegel pueden ayudar a fortalecer los músculos pélvicos para aliviar algunos síntomas, y los medicamentos y la cirugía son otras opciones de tratamiento.
Asimismo, es importante resaltar que el parto puede ser vaginal o por cesárea con base en tu situación médica actual y la de tu bebé, por lo que tu médico sabrá cuál opción será la mejor y más segura para ambos, y no necesariamente significa que si es vaginal sufrirás incontinencia urinaria y si es por cesárea no, pues también depende de otros factores como tu edad, tu genética y tu estilo de vida. Finalmente, recuerda que el parto por cesárea puede significar un tiempo de recuperación más prolongado después del nacimiento de tu bebé.
Vía: A to Z Health Guide
