Un infarto cerebral hemorrágico, también llamado evento cerebrovascular hemorrágico, ocurre cuando una arteria en el cerebro se abre o pierde sangre. La sangre de dicha arteria crea un exceso de presión en el cráneo e hincha el cerebro, dañando las células y los tejidos cerebrales.
Los dos tipos de eventos cerebrovasculares hemorrágicos son intracerebrales y subaracnoideos.
El infarto cerebral hemorrágico intracerebral es el tipo más común de evento cerebrovascular hemorrágico. Este se presenta cuando los tejidos que rodean el cerebro se llenan de sangre después de que revienta una arteria.
Conoce más: ¿Cómo se trata un infarto cerebral hemorrágico?
Un evento cerebrovascular hemorrágico subaracnoideo es menos común. Este ocasiona sangrado en el área entre el cerebro y los tejidos que lo cubren.
De acuerdo con la Asociación Estadounidense del Corazón, alrededor del 13 por ciento de los eventos cerebrovasculares son hemorrágicos.
RECUERDA: Ciertos factores de riesgo te hacen más susceptible a un infarto cerebral. Según datos del Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos, los factores de riesgo de evento cerebrovascular incluyen dieta inadecuada, inactividad, consumo excesivo de alcohol, tabaquismo, historial familiar de presión alta o infarto cerebral, sexo femenino, edad avanzada, raza negra, historia personal de: presión alta, infarto previo, colesterol alto, obesidad, problemas de corazón, problemas de coagulación, etc.
Fuente: Healthline