Los tratamientos para el infarto cerebral o evento vascular cerebral (EVC) incluyen medicamentos, cirugía y rehabilitación. Los que recibas dependerán del tipo de EVC y de la etapa del tratamiento. Las diferentes etapas incluyen:
- Tratamiento agudo, para intentar detener un EVC (también llamado ictus) mientras está ocurriendo.
- Rehabilitación post-ictus, para superar las discapacidades provocadas por el infarto cerebral.
- Tratamiento preventivo, para evitar un primer ictus o, si ya lo experimentaste, prevenir otro más adelante.
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Los tratamientos agudos para el EVC isquémico suelen ser medicamentos. Estos incluyen:
- Recibir tPA (activador del plasminógeno tisular), un medicamento para disolver coágulos en la sangre. Solo puedes recibir este medicamento dentro de las 4 horas posteriores a la aparición de los síntomas. Cuanto antes puedas obtenerlo, mayores serán tus posibilidades de recuperación.
- Si no puedes recibir dicho medicamento, pueden administrarte otro que ayude a evitar que las plaquetas se agrupen para formar coágulos de sangre. O puedes recibir un anticoagulante para evitar que los coágulos existentes se agranden.
- Si padeces enfermedad de la arteria carótida, es posible que también requieras un procedimiento para abrir dicha arteria y quitar el bloqueo.