De acuerdo con el doctor Thomas Jang, jefe asociado de oncología urológica en el Instituto de Cáncer Rutgers de Nueva Jersey en New Brunswick (Estados Unidos), los hombres jóvenes deben familiarizarse con los síntomas del cáncer testicular y saber cómo realizarse un autoexamen.
Aunque este cáncer representa menos del 1% de todos los cánceres masculinos, generalmente ocurre en hombres de entre 20 y 34 años de edad. Las tasas de curación rondan el 95%, especialmente cuando el cáncer se detecta en etapas tempranas.
«Algunos hombres pueden sentirse nerviosos o incómodos al hablar con sus médicos, o con cualquier persona, sobre el tema del cáncer testicular. No hablar o esperar y dejar que una masa testicular simplemente desaparezca por sí sola es peligroso, ya que puede provocar cáncer capaz de afectar a otras partes del cuerpo», explicó Jang.
Los factores de riesgo para desarrollar cáncer testicular incluyen testículos que no descienden al escroto al nacer y antecedentes familiares o personales de la enfermedad.
Los autoexámenes regulares para la enfermedad son fáciles de llevar a cabo, indicó Jang.
Conoce más: Infertilidad masculina relacionada con cáncer testicular
«Para autoexaminarse, una persona debe sostener cada testículo por separado entre los pulgares y los índices de ambas manos y girarlo suavemente, buscando bultos duros o masas redondeadas, así como cambios en la forma o el tamaño», señala el experto.
Jang menciona que en algunos casos de cáncer testicular avanzado o que se ha diseminado a otras partes del cuerpo, los hombres pueden experimentar dolor de espalda o abdominal, tos o pérdida de peso involuntaria.
«Cualquier hombre que sienta una masa testicular o tenga estos síntomas debe buscar atención médica», subrayó Jang.
La mayoría de los casos de cáncer de testículo, incluso si llegaron a una etapa avanzada, se pueden curar con cirugía, quimioterapia, radiación o una combinación de estos tratamientos. En algunos hombres, es recomendable que tengan un seguimiento después del diagnóstico.
Una vez terminado el tratamiento o la cirugía, la mayoría de los pacientes pueden regresar a su vida normal, además de que tendrán una función sexual y una fertilidad normales, asegura Jang.
Vía: Health Day News