Dentro del marco del 53 Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los ministros de salud del Continente Americano acordaron tomar medidas para mejorar la atención a los trastornos mentales en sus respectivas naciones.
Entre estos planes de acción figura la elaboración de estrategias de prevención para aquellos que padezcan problemas mentales y relacionados con el uso de estupefacientes, además de asegurar servicios efectivos para los pacientes con trastornos mentales.
Como resultado fue aprobado el Plan de Acción de Salud Mental, dicho plan tiene como fin promover el bienestar mental, prevenir trastornos mentales y el uso de sustancias, además de ofrecer atención y rehabilitación a los pacientes, todo lo anterior siguiendo un modelo de atención comunitario.
Se calcula que en el continente entre un 7 y un 24.2 por ciento de la población sufre algún tipo de enfermedad mental, el más común de estos padecimientos sigue siendo la depresión que es dos veces más frecuente en mujeres que en hombres. De las mujeres en países en desarrollo se calcula que entre un 20 y 40 por ciento sufre depresión durante el embarazo o en las semanas posteriores al nacimiento del bebé. En los países desarrollados este porcentaje es de entre un 10 y 15 por ciento.
Se calcula además que cerca de 65 mil personas se suicidan al año en el continente americano.
Los ministros de salud expresaron también preocupación por los trastornos relacionados con el consumo de alcohol y sustancias psicoactivas, debido a que más de un 73 por ciento de los adultos en el continente no recibe un tratamiento adecuado para rehabilitarse de las adicciones.
Jorge Rodríguez, asesor de salud mental de la OPS detalló los alcances que pretende el plan de acción para atacar los trastornos mentales: “Este plan de acción insta a los países a evolucionar hacia un modelo de atención a la salud mental integral, descentralizado, participativo, basado en la comunidad, vinculado con la atención primaria de la salud, al que todos quienes lo necesiten puedan acceder, sin importar su condición, y donde haya servicios calificados de tratamiento y rehabilitación psicosocial”.
Se espera que este plan se aplique en seis años; la OPS llamó a tener flexibilidad con este plan para que se puedan adecuar a cada país. Entre las principales líneas de acción se encuentran: Implementar leyes y estrategias de salud mental, promover el acceso universal a la atención de salud mental, evolucionar hacia un modelo de atención mental comunitaria integrado a la atención primaria y en hospitales generales, fortalecer los recursos humanos para la atención de enfermedades mentales, emprender acciones para reducir los suicidios, mejorar la investigación sobre el tema y fortalecer las alianzas gubernamentales para combatir estos males.
Vía: Organización Panamericana de la Salud