Fumar es una adicción que causa o contribuye a una amplia gama de enfermedades, incluidos cánceres, enfermedades cardíacas y enfisema. La mejor protección contra las enfermedades relacionadas con el tabaquismo es nunca fumar en primer lugar. Sin embargo, los niños que ingresan a la adolescencia buscan experimentar, además de que son curiosos y vulnerables a la presión de sus compañeros, así lo indica el Departamento de Salud del Gobierno del Estado de Victoria, en Australia.
El hecho de que tu hija o hijo elijan fumar con regularidad, o no, depende de una serie de factores. No siempre es posible que los padres impidan que sus hijos prueben cigarrillos, pero el uso de diversas estrategias puede reducir la probabilidad de que un niño quiera fumar y lo haga con regularidad. Estas incluyen:
- No permitir que nadie fume en casa.
- No enviar a tus hijos a comprar cigarrillos para ti ni para nadie más.
- Fomentar el deporte y la actividad física para todos los miembros de la familia.
- Discutir el tema de fumar con tu hijo(a) cuando vea que otras personas fuman.
- No permitir que tu hijo(a) encienda un cigarrillo por ti ni por nadie más.
- Si hay fumadores adultos en la casa, asegúrate de que guarden sus cigarrillos donde tu hijo(a) no pueda acceder a ellos.
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¿Por qué fuman algunos niños?
Algunas de las razones por las que tu hijo(a) puede intentar fumar cigarrillos incluyen:
- La vinculación con otros niños y el deseo de encajar con amigos
- Copiar a los padres, hermanos o hermanas mayores que fuman
- El deseo de afirmar su creciente independencia
- El deseo de parecer más adulto(a) y sofisticado(a)
- Curiosidad
- Imitar imágenes atractivas de actores o modelos en películas, videojuegos o redes sociales.
Aunque actualmente se han prohibido la mayoría de las formas de publicidad del tabaco, los niños están cada vez más expuestos a la publicidad y las diferentes marcas a través de Internet y las redes sociales, incluyendo Facebook y YouTube. En una encuesta australiana, los niños más pequeños, las niñas, los niños de entornos más pobres y los niños que nunca han fumado mostraron más probabilidades de reportar haber visto promociones de tabaco en línea.
Algunos grupos de niños están en mayor riesgo de fumar que otros. Tales grupos incluyen a niños que experimentan depresión, ansiedad o angustia emocional, niños con problemas de salud mental o de comportamiento y niños que tienen ciertos temperamentos, como falta de autocontrol, rebeldía o que son propensos a buscar sensaciones y asumir riesgos.
Con base en la información anterior, si ves que tu niña o niña tiene la curiosidad o ha empezado a hacerlo a tus espaldas, acérquense con su médico y con un especialista en adicciones.
Fuente: Better Health Channel – Department of Health, State Government of Victoria, Australia