El glutamato monosódico (GMS) es un potenciador del sabor que se añade con frecuencia a verduras enlatadas, sopas, fiambres y comidas de restaurante para darles un sabor intenso y sabroso. Está hecho de sodio y ácido L-glutámico, un aminoácido no esencial presente de forma natural en alimentos ricos en umami como tomates, anchoas, champiñones y queso parmesano.
Aunque es recomendable evitar o reducir el consumo de alimentos envasados que contienen GMS, este potenciador del sabor podría ayudarte a reducir la cantidad de sodio que consumes al cocinar en casa. A pesar de tener la palabra «sodio» en su nombre, el glutamato monosódico contiene solo 12.28 gramos de sodio por cada 100 gramos. Esto equivale aproximadamente a un tercio del sodio presente en la sal de mesa (39.34 gramos/100 gramos).
Conoce más: Sazona tus comidas de forma saludable con estas 21 hierbas y especias
Si sustituyes media cucharadita de sal de mesa por la misma cantidad de GMS, reducirás el contenido de sodio de tus alimentos en aproximadamente un 37%, sin perder mucho sabor. Como cocinero(a) casero(a), eso significa que el uso de glutamato monosódico podría ayudar a mejorar la percepción de salinidad y al mismo tiempo reducir el contenido real de sodio en los alimentos.
Recuerda consultar a tu médico o a un(a) experto(a) en nutrición antes de utilizar GMS para cocinar en casa.
Fuente: Harvard Medical School