Es común que los hombres aumenten de peso con la edad. El metabolismo se ralentiza de forma natural y la masa muscular magra disminuye de forma constante, lo que hace que el cuerpo queme calorías a un ritmo más lento. Asimismo, la mayoría de los hombres consumen más calorías diarias de las que requieren. Cuando se ingieren calorías adicionales y no se queman, se almacenan como grasa.
Pero el verdadero problema del aumento de peso reside en dónde se acumula dicha grasa extra.
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Según su ubicación, la grasa se puede clasificar como subcutánea o visceral. La grasa subcutánea se encuentra justo debajo de la piel. La grasa visceral se encuentra en lo profundo de la cavidad abdominal y rellena los espacios entre los órganos abdominales.
De las dos, la grasa visceral es la más peligrosa, ya que un nivel elevado de grasa se relaciona con factores de riesgo de enfermedades cardíacas, como hipertensión arterial, niveles elevados de azúcar en sangre y niveles altos de colesterol. ¿Tienes demasiada grasa visceral? Revisa tu cintura. Para los hombres, una cintura de 101 cm o más se considera un signo de exceso de grasa visceral. Pero incluso un pequeño cambio en la vestimenta, como unos pantalones que ahora te quedan ajustados o tener que cambiar las muescas del cinturón, son señales de un aumento de grasa visceral.
Fuente: Harvard Medical School
