El hecho de que hayas recibido tu vacuna contra COVID-19 no significa que debas dejar de tomar medidas para protegerte a ti mismo(a) y a los demás, así lo afirman los expertos.
Tan solo en Estados Unidos, aproximadamente 60,000 personas dan positivo para el virus cada día, y hay un número creciente de hospitalizaciones por COVID-19, revela una investigación.
Una tendencia preocupante es un número creciente de adultos jóvenes con complicaciones graves de COVID-19, señala el doctor Fahad Khalid, jefe de medicina hospitalaria del Centro Médico Milton S. Hershey del Sistema de Salud de la Universidad Estatal de Pensilvania, en Hershey.
«Durante las últimas dos semanas, hemos visto un aumento en las personas de 40 a 60 años con insuficiencia respiratoria», comentó el médico. «Este es un grupo de edad que tal vez no usa máscaras o distanciamiento social porque la probabilidad de desarrollar una enfermedad grave no es tan alta, pero es difícil saber quién se enfermará gravemente y quién no».
Por su parte, la doctora Emily Link, doctora en medicina interna del Centro Ambulatorio Cocoa del citado sistema de salud, cree saber lo que está impulsando los aumentos.
«Creo que la gente está cansada de aislarse, y tal vez están escuchando buenas noticias sobre la vacunación y están empezando a aflojar las pautas antes de lo debido», lamentó.
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Pero hasta que un porcentaje mayor de la población se vacune, es importante seguir usando máscaras y practicar el distanciamiento social en público, enfatizó Link.
«Romper la cadena de transmisión es la mejor herramienta para evitar que surjan más variantes», aseguró. «Si esperas a vacunarte, puedes convertirte en una incubadora para que el virus se replique y mute».
Link subrayó que las personas que adoptan un «enfoque de esperar y ver qué pasa» con la vacuna están arriesgando su vida, ya que incluso las personas sin afecciones subyacentes pueden desarrollar complicaciones críticas por COVID-19 y morir.
«La gente puede decir que no se sabe lo suficiente sobre la seguridad a largo plazo de la vacuna, pero tampoco tenemos idea de los efectos a largo plazo de una infección por COVID-19. En este momento, lo que sí sabemos es que los datos de seguridad que rodean a la vacuna son sólidos, y el balance riesgo-beneficio realmente favorece a la vacuna», agregó la experta.
Link expresó optimismo respecto al panorama actual comparado con el de hace un año.
«Si nos vacunamos, usamos máscaras faciales, nos mantenemos a dos metros de distancia y socializamos con nuestros seres queridos al aire libre, estamos en una mejor posición para que estos números sean mucho más bajos este verano», concluyó.
Vía: Health Day News