Cáncer, Corazón, Diabetes, Obesidad y nutrición, Salud Mental
Algunos especialistas afirman que la batalla para prevenir la demencia debe alejarse de una estrategia basada en los fármacos, la cual tiene “dudosos” resultados, y orientarse hacia los beneficios de una dieta mediterránea. Lo anterior lo señalaron un grupo de médicos y trabajadores de la salud en una carta dirigida a Jeremy Hunt, secretario de Salud de Gran Bretaña, previo a una reunión de expertos del G8 en el tema.
Los firmantes de la carta consideran que se debe persuadir a la gente para que coma más fruta y verduras frescos, frutos secos, pescado y aceite de oliva, pues esto es “posiblemente la mejor estrategia disponible en la actualidad».
Hunt ha llamado a la demencia una «bomba de tiempo” para la salud debido al número de personas que viven con esta condición, según informes recientes en 2050 la cifra llegará a 135 millones.
Entre los signatarios de la carta se encuentran la profesora Clare Gerada, ex presidente del Real Colegio de Médicos Generales; David Haslam, presidente del Foro Nacional de Obesidad; Simon Capewell, profesor de Epidemiología Clínica de la Universidad de Liverpool; y el cardiólogo Dr. Aseem Malhotra.
Los especialistas dijeron que fomentar con éxito una dieta saludable entre gente podría tener un impacto mucho mayor para reducir las tasas de crecimiento del padecimiento. Esto, señalan, funcionaría mejor que las intervenciones médicas con fármacos que tienen un “dudoso beneficio”. Además, dijeron, podría prevenir contra enfermedades coronarias, la hipertensión y la diabetes.
Una investigación realizada por la Universidad de la Escuela de Medicina de Exeter encontró que la mayoría de los estudios sugieren que la dieta podría mejorar la función cognitiva, menores tasas de declive y reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer.
Sin embargo, los resultados para el deterioro cognitivo leve -la etapa antes de la enfermedad de Alzheimer o la demencia, cuando alguien puede estar experimentando algunas dificultades cognitivas- fueron inconsistentes.
El Dr. Malhotra explica que “la base de evidencias para la dieta mediterránea para prevenir las enfermedades crónicas -que son una plaga en el mundo occidental- son abrumadoras. Esto incluye padecimientos cardiovasculares, diabetes tipo 2, Alzheimer y cáncer”.
Por su parte el Dr. Simon Poole, un destacado defensor de la dieta mediterránea, dijo que “estamos haciendo un llamado a los legisladores para apoyar no sólo el cuidado y tratamiento de las personas que ya sufren de demencia, sino para hacer una importante inversión en los trabajos que verán resultados después de uno o dos periodos parlamentarios”.