Entre las personas que recién comienzan a realizar ejercicio por las mañanas de forma frecuente, suele existir la duda de si es mejor desayunar antes o después de su sesión de entrenamiento.
Sobre este tema se han llevado a cabo diversos estudios, la gran mayoría de los cuales coinciden en un par de aspectos:
1. Desayunar antes de una sesión matutina de ejercicio aporta mayores beneficios a la salud que hacerlo después.
2. Realizar ejercicio matutino sin desayunar es una acción recomendada únicamente para deportistas o atletas de alto rendimiento. Esto se debe a que su organismo es capaz de asimilar igual de bien los nutrientes antes o después de entrenar.
Permite quemar más carbohidratos
Al respecto, un reciente estudio británico encontró que desayunar antes de realizar ejercicio por las mañanas permite quemar una mayor cantidad de carbohidratos, lo que ayuda a mantener el peso bajo control.
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“Encontramos que el desayuno antes del ejercicio aumenta la quema de carbohidratos durante el entrenamiento, y que esos carbohidratos no provenían solo del desayuno recién consumido, sino también de los carbohidratos almacenados como glucógeno en nuestros músculos”, compartió Rob Edinburgh, colíder del estudio y estudiante doctoral en la Universidad de Bath, en Inglaterra.
Acelera la digestión
Otro de los beneficios de desayunar antes de realizar ejercicio por las mañanas fue que hacerlo aumentó el ritmo al que el cuerpo digería y metabolizaba la comida consumida el resto del día.
“Este estudio sugiere que, al menos tras una sola sesión de ejercicio, desayunar antes del ejercicio podría ‘preparar’ a nuestro cuerpo para que esté listo para un almacenamiento rápido de la nutrición cuando consumimos comidas después”, explicó Javier González, colíder del estudio.
Vía: Health Day News
