El ardor en los pies se presenta como una sensación de que los pies están calientes y duelen. En algunos casos, este síntoma provoca un dolor tan fuerte que interfiere con el sueño y, en ocasiones, puede estar acompañado de hormigueo o entumecimiento.
Aunque el cansancio o una infección en la piel pueden ser causa de que los pies se inflamen o ardan temporalmente, el ardor en los pies se considera un signo de lesión nerviosa —neuropatía periférica—.
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¿Qué es la neuropatía periférica?
La neuropatía periférica es un conjunto de síntomas causados por el daño a los nervios que se encuentran fuera del cerebro y la médula espinal. Estos nervios distantes se llaman nervios periféricos.
Los nervios periféricos conducen las sensaciones al cerebro y controlan el movimiento de los brazos y las piernas. También controlan la vejiga y los intestinos.
Las lesiones nerviosas, como la neuropatía periférica, tienen muchas causas posibles, entre ellas:
- Diabetes.
- Consumo crónico de alcohol.
- Exposición a ciertas toxinas.
- Ciertas deficiencias de vitamina B.
- Infección por VIH.
¿Cuándo buscar atención médica?
- Una herida abierta en el pie parece estar infectada, en especial si padeces diabetes.
- Continúas sintiendo ardor en los pies, a pesar de varias semanas de autocuidado.
- Sientes que el síntoma se intensificó y es más doloroso.
- La sensación de ardor ha empezado a expandirse a las piernas.
- Empiezas a perder la sensibilidad en los dedos o en los pies.
Considera que si el ardor en los pies persiste o si no hay una causa aparente, el médico deberá hacerte algunos estudios para determinar si la causa es alguna de las varias enfermedades que causan neuropatía periférica.
Evita minimizar tus síntomas, visita a un profesional de la salud ante cualquier malestar. Si padeces diabetes, habla con un médico sobre tus problemas en los pies.
Fuente: Mayo Clinic