La mayoría de la gente piensa que todos los productos nuevos para bebés y niños que se comercializan son seguros. Aunque la mayoría de los diseñadores y fabricantes trabajan para asegurarse de que los productos que venden cumplan todas las normas de seguridad, de vez en cuando no lo hacen, y regularmente aparecen nuevos productos en el mercado.
En ocasiones, surgen problemas de seguridad relacionados con su diseño o uso después de que están disponibles para su venta. Ten cuidado con las cunas de segunda mano y las antiguas, ya que pueden representar un peligro para los niños. Mucha gente piensa que los productos heredados y de segunda mano son seguros porque otros los han usado sin ningún problema.
Además, es un mito que los productos de segunda mano deben ser seguros si su primer propietario no sufrió lesiones. El riesgo de lesionarse puede ser elevado o haber aumentado si el producto es viejo y se ha desgastado, dañado o ha perdido sus instrucciones de montaje o uso.
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Muchos niños han sufrido accidentes con productos heredados y de segunda mano que eran frágiles, estaban rotos o se habían usado incorrectamente.
Por ello, asegúrate de:
- Verificar las características de seguridad de los productos para bebés y niños que compre o le regalen.
- Utilizar los productos de forma segura.
- Encontrar y eliminar los peligros de tu hogar que puedan hacer que estos productos sean inseguros.
Es importante que haya una superficie segura para que tu bebé duerma. Utiliza únicamente un colchón firme que encaje perfectamente en la cuna. No utilices protectores de cuna ni ropa de cama blanda, ya que se han relacionado con accidentes mortales durante el sueño. Asimismo, no utilices colchones adicionales.
Fuente: Better Health Channel
