Durante el invierno, cualquier persona posee un riesgo adicional de sufrir heridas en sus pies o tobillos, desde huesos rotos hasta congelación. Sin embargo, y de acuerdo con un cirujano especializado en podología, es posible protegernos.
«Durante los meses de invierno, los pacientes deben tomar precauciones adicionales para mantener sus pies calientes y secos cuando naveguen en temperaturas frías, especialmente aquellos que tienen condiciones de salud pre-existentes», comentó el doctor Greg Catalano, un cirujano de pie y tobillo que reside en Massachusetts.
Uso de calzado, medias y calentadores
El experto dijo que el primer paso es usar calzado adecuado.
«Ya sean causadas por el uso de tacones altos en superficies heladas o simplemente por un accidente, las caídas son una de las causas más comunes de lesiones relacionadas con el clima. Muchas veces, las caídas de invierno resultan en un esguince de tobillo, o peor, en un hueso roto del pie, tobillo, talón o dedo del pie. Recomiendo a los pacientes usar zapatos o botas de tacón bajo con suela de tracción, para ayudar a evitar el deslizamiento«, dijo Catalano.
El calzado resistente al agua y aislado proporciona una barrera entre los pies y los elementos exteriores. Esta barrera es particularmente importante para las personas con neuropatía (daño nervioso) o enfermedad de Raynaud (sensibilidad extrema al frío), indicó el médico.
«Aunque son distintas, ambas condiciones bloquean el flujo sanguíneo normal en los pies y ponen a la persona en mayor riesgo de desarrollar problemas adicionales. En algunos casos, las personas pueden desarrollar sabañones, que son inflamaciones rojizas que producen picor y quemazón que aparecen en respuesta al aire frío, o en casos extremos, congelación», advirtió Catalano en un comunicado de prensa del Colegio Americano de Cirujanos de Pie y Tobillo de Estados Unidos.
También es una buena idea usar medias que eviten la humedad causada por el sudor, agregó.
Algunas personas colocan calentadores en sus zapatos, pero Catalano enfatizó que pueden quemar la piel y causar daño severo a las personas con daño en los nervios. Por ello, recomienda hablar con un experto en pies antes de usarlos.
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Cuidados para tus pies y tobillos
Si sufres problemas de pie y tobillo, toma las medidas adecuadas, aconsejó.
«En el caso de una supuesta fractura o esguince causado por una caída, consulta a un cirujano de pie y tobillo o visita la sala de emergencias tan pronto como sea posible, para que recibas un diagnóstico y tratamiento inmediatos. Si la atención médica no está disponible, para aliviar temporalmente los síntomas, prueba el principio DHCE: Descansar, Hielo, Compresión y Elevación. No obstante, recuerda que retrasar el tratamiento puede resultar en complicaciones a largo plazo«, subrayó Catalano.
Si tus pies están expuestos al frío y a la humedad durante mucho tiempo, empápalos en agua tibia, no caliente. Evita el calor directo. Un remojo de agua caliente permitirá a tus pies recuperar su temperatura normal gradualmente, concluyó el experto.
Vía: Health Library