Dado que el COVID-19 influye en las políticas hospitalarias relacionadas con las visitas y el apoyo durante este tiempo, es importante que los padres tengan en cuenta que podría haber nuevos protocolos, como permitir que solo un tutor o persona de apoyo acompañe a los pacientes pediátricos menores de 18 años.
«En caso de que desees acompañar a tu hijo adulto mayor de tan solo 18 años, prepárate pues no podrás ingresar a la unidad de salud», señala Karen Eigen, médico de medicina de emergencia pediátrica en el Centro Médico de la Universidad de Hackensack (Estados Unidos). “Si bien esto puede ser molesto, los equipos clínicos están trabajando para garantizar una comunicación activa con los padres/tutores a través del teléfono y la comunicación virtual, incluido el chat de video. Políticas como estas se instituyen para proteger a nuestros pacientes y al personal».
Por ello, si crees que necesitas llevar a tu hijo al hospital por alguna emergencia, sigue estos pasos:
- Llama primero a su pediatra para evaluar la situación.
- Llama al departamento de emergencias antes de que lleguen a las instalaciones, o pídele al pediatra que llame con anticipación, ya que esto permitiría que el equipo encuentre a tu hijo en el automóvil y lo acompañen de manera segura.
- Prepara a tu hijo para la realidad potencialmente estresante de ver a los miembros del equipo con máscaras, y hazle saber que también necesitarán usar máscaras.
- Evita traer a otros niños que no requieran atención médica junto con tu hijo enfermo.
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¿Cómo acceder a la atención si experimentas síntomas de COVID-19?
En el caso especial de que tú o tu hijo experimenten síntomas relacionados con el COVID-19 y debas llevar a tu niño al hospital para recibir atención de emergencia, los profesionales de la salud afirman que no tendrás que separarte de tu hijo, siempre y cuando sea menor de 18 años.
«A medida que vemos una prevalencia cada vez mayor de pacientes con COVID-19 positivo, debemos anticipar que ocurran diferentes escenarios, como que un padre con síntomas tenga la necesidad de llevar a su hijo a atención de emergencia», agrega Eigen. “Si bien recomendaríamos que cualquier padre enfermo haga arreglos para que otro adulto de confianza lleve a su hijo, entendemos que no siempre es una opción. Si este es el caso, es aún más importante ponerse en contacto con el departamento de emergencias antes de que lleguen, para permitirles tener mucho cuidado y así disminuir la posibilidad de exposición accidental a otras personas durante su visita».
