Los receptores de trasplantes de órganos corren un mayor riesgo de cáncer de piel y necesitan protegerse, así lo advierte una dermatóloga experta en el rubro.
«Las personas que reciben trasplantes de órganos necesitan tomar medicamentos inmunosupresores por el resto de sus vidas, y esto hace que sea más difícil para sus cuerpos combatir las enfermedades, incluido el cáncer de piel», aseguró la doctora Christina Lee Chung, directora del Centro de Dermatología Drexel para pacientes de trasplantes en Filadelfia.
«Además de eso, algunos de estos medicamentos hacen que la piel sea más sensible a los dañinos rayos ultravioleta del sol, lo que puede aumentar aún más el riesgo de cáncer de piel en los pacientes», agregó en un comunicado de prensa de la Academia Americana de Dermatología (AAD).
Los pacientes de trasplante con mayor riesgo de cáncer de piel incluyen aquellos con piel más clara, hombres y cualquier persona con antecedentes de cáncer de piel pretrasplante. Si recibieron su nuevo órgano a los 50 años o más, o tuvieron un trasplante de pulmón o corazón, también corren un mayor riesgo.
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«Es importante para todos los pacientes de trasplantes de órganos, independientemente del tono de piel, reconocer el riesgo de este cáncer», subrayó Chung. Deben evitar la exposición al sol, «lo que podría aumentar aún más ese riesgo, y examinar regularmente todo el cuerpo, incluida el área genital, en busca de signos de cáncer de piel para que puedan detectar la enfermedad en etapa temprana, cuando es más tratable».
Además, los receptores de trasplantes de órganos «deben establecer una relación con un dermatólogo certificado después de su procedimiento», recomendó Chung.
«Un dermatólogo puede evaluar tus factores de riesgo únicos y ayudarte a garantizar la salud de tu órgano más grande: tu piel», enfatizó.
Todos deben proteger su piel del sol usando ropa protectora, aplicando generosamente un protector solar de amplio espectro y resistente al agua con un factor de protección solar de 30 o más para la piel expuesta, al igual que buscando sombra cuando sea posible, informa la AAD.
La academia también recomienda realizarte autoexámenes periódicos de cáncer de piel y pedirle a un compañero que te ayude a verificar las áreas difíciles de observar, incluida la espalda. Si observas manchas nuevas, manchas sospechosas que parecen diferentes de las otras en tu piel, o cualquier cosa que cambie, o si tienes picazón o sangrado, consulta a un médico.
Vía: Health Day News