De acuerdo con un nuevo estudio publicado en la revista Journal of Applied Psychology, el alejarse del escritorio durante la jornada laboral puede estimular la energía, la concentración y la motivación especialmente si los recesos son del tipo correcto.
Para comprobarlo, los investigadores encuestaron a casi 100 empleados de entre 22 y 67 años a lo largo de una semana laboral de 5 días, pidiéndoles que documentaran cada receso o descanso que tomaban. Se consideró como un receso a cualquier periodo formal o informal durante el cual no se espera o se requiere cualquier tarea relacionada con el trabajo. Algunos ejemplos son una pausa para tomar café, la hora de la comida, revisar el correo electrónico personal o las charlas con los compañeros de trabajo.
Los resultados mostraron que el tiempo más beneficioso para tomar un descanso de trabajo es a media mañana. Los recesos tempranos mostraron ser más restauradores, y los mejores descansos fueron los que incorporaron actividades que disfrutan los empleados a diferencia de actividades asignadas. Este tipo de descansos ayudó a los empleados a que regresaran al trabajo fortalecidos. Además, incrementaron la satisfacción laboral y disminuyeron quejas y agotamiento emocional, dolor de cabeza, vista cansada y dolor lumbar.
A diferencia de los teléfonos móviles que trabajan de forma óptima hasta que sus baterías se agotan, las personas «deben recargarse con más frecuencia antes de que nos descarguemos por completo«, explicó Emily Hunter, profesora asociada de administración en la Escuela Hankamer de Negocios de la Universidad de Baylor en Waco, Texas, EU y autora principal del trabajo.
Aunque los recesos largos mostraron ser beneficios, los recesos cortos más frecuentes mostraron ser más.
Los investigadores concluyeron que esto sugiere que se debería animar a los empleados a tomar descansos cortos frecuentes para fomentar la recuperación.
Vía: HealthDay News, EurekAlert!
