La incontinencia vesical (de la vejiga) o intestinal se refiere a la incapacidad para retener la orina o las heces. Es posible que tengas una fuga no deseada de orina o heces que no puedes controlar. Tales condiciones pueden ser estresantes cuando hay que tratarlas. Pero no te sientas avergonzado(a) de hablar con tu proveedor de atención médica. Están acostumbrados a lidiar con estos problemas y pueden ayudarte a manejar la situación.
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Algunos estrategias de tratamiento comunes incluyen:
- Cambios en la comida o bebida. Aumentar el consumo de fibra puede ayudar a controlar la diarrea y el estreñimiento. Beber muchos líquidos también puede aliviar la constipación. No beber líquidos en determinados momentos puede ayudar a controlar la vejiga hiperactiva y la incontinencia urinaria.
- Ejercicios. Los ejercicios de Kegel pueden fortalecer los músculos del esfínter y el suelo pélvico. Esto puede ayudarte a tener un mejor control.
- Medicamentos. Algunos medicamentos permiten controlar la incontinencia intestinal. Los medicamentos antidiarreicos pueden ayudar a controlar la diarrea. Asimismo, los medicamentos pueden facilitar que los músculos de la vejiga se relajen para brindarte un mejor control.
- Mantener un horario de baño. Establecer un horario regular para usar el baño puede brindarte un mejor control. Esto incluye intentar orinar o defecar a la misma hora todos los días.
- Estimulación eléctrica. Esta terapia puede estimular los nervios dañados, lo que a su vez puede brindarte un mejor control muscular en la vejiga o el intestino.
- Cirugía. En casos raros, es posible que requieras cirugía para reparar el daño a los músculos o los nervios.
Tu proveedor de atención médica trabajará contigo para crear un plan de tratamiento.
Fuente: Johns Hopkins Medicine