La piel seca hace que tu piel luzca y se sienta áspera, con picazón y escamosa. La ubicación donde se forman estas manchas secas varía de persona a persona. Concretamente, es una condición común que afecta a personas de todas las edades.
La piel seca, también conocida como xerosis o xerodermia, posee muchas causas, entre ellas el clima frío o seco, el daño solar, los jabones fuertes y los baños excesivos.
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La piel seca suele ser temporal o estacional (por ejemplo, puede aparecer solo en invierno) o puede que requieras un tratamiento a largo plazo. Los signos y síntomas de la piel seca pueden variar según la edad, el estado de salud, el tono de la piel, el entorno en el que vives y la exposición al sol.
La mayoría de los casos de piel seca responden bien a los cambios en el estilo de vida y a los remedios caseros. Es posible que necesites ayuda de tu médico de atención primaria o de un médico que se especialice en afecciones de la piel (dermatólogo) si:
- Has probado medidas de cuidado personal pero tus signos y síntomas persisten.
- Tu piel se inflama o te duele.
- Tienes la piel seca y gruesa como efecto secundario del tratamiento contra el cáncer.
- Tu afección te genera tanta incomodidad que no puedes dormir o te distraes de tus rutinas diarias.
- Tienes llagas abiertas o infecciones por rascarte.
- Tienes grandes áreas de piel escamosa o descamada.
Fuente: Mayo Clinic
