La extracción de esencias de plantas por medios naturales produce aceites puros y de alta calidad. Tales aceites se pueden utilizar de diversas maneras. Mucha gente los usa estrictamente como producto de aromaterapia.
Asimismo, estos aceites se pueden aplicar sobre la piel o difundir en una vaporera. Inhalar suavemente los aromas puede aportar beneficios que incluyen relajación y alivio del dolor de cabeza.
En el caso concreto del asma, esta es una afección que a menudo empeora en momentos de ansiedad. Por ello, los ejercicios de respiración combinados con algo de aromaterapia pueden ofrecer alivio en muchos casos.
Algunos aceites esenciales poseen una acción antiinflamatoria y pueden ser beneficiosos para tratar el asma en algunas personas.
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La mayoría de los estudios de calidad, revisados por pares, han analizado y examinado exclusivamente el potencial de los aceites esenciales como opciones de aromaterapia. Cabe destacar que dichos aceites nunca deberían usarse como el tratamiento principal para el asma y nunca sin consultar previamente a tu médico de cabecera, ya que para algunas personas, la aromaterapia puede desencadenar síntomas.
No obstante, varios aceites han demostrado potencial como tratamientos alternativos para los síntomas del asma, entre ellos:
- Clavo (puede ayudar a reducir síntomas como sibilancias, dolor de pecho y dificultad para respirar).
- Romero (su extracto relaja los músculos lisos de la tráquea, y disminuye los síntomas como tos, producción de esputo y sibilancias).
- Tomillo (podría reducir la inflamación y respaldar la salud de las células pulmonares, pero se requieren más estudios).
Fuente: Healthline
