El alargamiento percutáneo del tendón de Aquiles es un procedimiento mínimamente invasivo que se utiliza para estirar un tendón de Aquiles tenso e incrementar el movimiento en la articulación del tobillo, así lo señala la Sociedad Estadounidense de Ortopedia de Pie y Tobillo.
Las personas con un tendón de Aquiles tenso tienden a caminar de puntillas. El tendón tenso impide que el pie quede plano sobre el suelo, lo que a su vez puede limitar el movimiento del tobillo. Cuando esta tensión no se puede tratar con estiramientos no quirúrgicos o fisioterapia, un cirujano ortopédico de pie y tobillo podría recomendar una cirugía.
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Dicho procedimiento puede ser solo una parte de una cirugía para ayudar a corregir la posición del pie. Los pacientes que desarrollan úlceras en la parte delantera del pie podrían requerir un alargamiento del tendón de Aquiles para disminuir la presión en la parte delantera de la extremidad y permitir que las úlceras cicatricen.
El procedimiento no es recomendable cuando hay infección activa o enrojecimiento alrededor del tendón de Aquiles. Un tendón muy tenso podría necesitar una cirugía de alargamiento más compleja.
Si deseas saber más sobre el alargamiento percutáneo del tendón de Aquiles, consulta a un médico ortopedista.