Si de repente sientes deseos de comer o beber algo justo antes de irte a dormir, es importante que te mantengas alejado(a) de las comidas abundantes y la cafeína.
Desde el punto de vista del sueño, no debes hacer una comida abundante a las 8 p.m. si planeas irte a la cama a las 9 p.m. Si eres sensible a la cafeína, es recomendable beberla alrededor del mediodía.
Beber cafeína antes de acostarte afectará tu sueño. Una persona promedio tarda entre 10 y 20 minutos en conciliar el sueño. Si tienes cafeína en tu sistema o eres sensible a ella, dicha cantidad de tiempo puede duplicarse.
Advertencias similares se aplican al ingerir comidas pesadas a altas horas de la noche. Consumir una comida abundante antes de ir a la cama afectará tu flujo sanguíneo y alterará los ciclos de sueño/vigilia.
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Tener mucha comida en el estómago antes de acostarte puede redirigir el flujo sanguíneo al intestino para digerir la comida, lo que significa que hay menos flujo de sangre hacia el cerebro. Concretamente, necesitas ese flujo sanguíneo a tu cerebro para que puedas pasar por las diferentes etapas del sueño.
Asimismo, si trabajas durante el turno de noche, tu horario de comida y bebida será distinto al de las personas que trabajan durante el día.
Entonces, si debes comer algo antes de irte a dormir, la mejor opción es comer algo ligero y fácil de digerir, como un plato de frutos rojos, yogur griego o incluso una manzana en rodajas con un poco de mantequilla de cacahuate.
Debe ser algo rico en proteínas o grasas vegetales saludables que permanezca en tu estómago por más tiempo.
En cuanto a lo que es bueno beber por la noche, no es necesario limitarse al agua. Beber leche o incluso agua con gas sin cafeína está bien. Si el café o el té es algo que simplemente necesitas tomar antes de acostarte, cambia a una versión descafeinada, pues será una mejor opción.
Fuente: Health Day
