El magnesio es un mineral esencial que participa en más de 300 reacciones en el cuerpo. Asimismo, es importante para la salud ósea, ya que alrededor del 60% de dicho mineral se encuentra en el tejido óseo.
La ingesta diaria recomendada (IDR) de magnesio es de 310 a 320 mg por día para personas de 19 a 30 años y de 400 a 420 mg por día para personas de 31 años o más. Las necesidades también aumentan ligeramente durante el embarazo y la lactancia.
Un estudio que evaluó a 51 mujeres en la posmenopausia descubrió que el 40% de aquellas con osteoporosis o baja densidad ósea tenían bajos niveles de magnesio circulante.
Conoce más: Suplementos de magnesio, ¿ayudan a prevenir los dolores de cabeza?
Además, varios estudios en adultos han descubierto que las personas que consumen mayores cantidades de magnesio a través de su dieta o suplementos poseen una mejor densidad de masa ósea, en comparación con aquellas que consumen cantidades bajas.
Aunque la ingesta adecuada de magnesio se ha asociado con beneficios para la densidad ósea, las investigaciones son contradictorias sobre si este beneficio se traduce en un riesgo reducido de fracturas óseas.
Debido a que se requiere más investigación sobre el papel y la dosis óptima de los suplementos de magnesio en el riesgo de osteoporosis y fracturas óseas, lo mejor es centrarse en consumir una dieta rica en alimentos que contengan magnesio, como nueces, semillas, cereales integrales y legumbres.
Si te preocupa satisfacer tus necesidades de magnesio únicamente a través de la dieta, debes hablar con tu médico para recibir recomendaciones personalizadas sobre los suplementos de magnesio.
Fuente: Healthline