En el asma estacional, los síntomas se intensifican en ciertas condiciones o en épocas particulares del año.
Por ejemplo, una persona con asma estacional puede notar que los síntomas empeoran o solo están presentes durante:
- La temporada de fiebre del heno, cuando los niveles de polen están en su punto más alto
- El clima frío o caluroso, o cuando hay tormentas eléctricas y cambios repentinos de temperatura
- Los días en los que la contaminación del aire es peor
- Los meses de invierno, cuando hay más virus del resfriado y de la gripe alrededor
En muchos sentidos, el asma estacional es similar al asma alérgica. De hecho, las personas pueden utilizar ambos términos para describir los ataques de asma que se presentan durante la temporada de polen.
Conoce más: Asma frágil, lo que debes saber
Las personas con asma estacional deben buscar tratamiento médico. Esto les ayudará a controlar su condición durante los períodos en los que es probable que los síntomas empeoren.
Asimismo, deben tomar cualquier medicamento recetado según lo indique su médico o proveedor de atención médica.
Los siguientes consejos también pueden ayudar a reducir los síntomas del asma estacional:
- Presta atención a los informes meteorológicos locales sobre la calidad del aire y los niveles de polen, y solo planifica actividades al aire libre cuando las condiciones sean menos probables de desencadenar un ataque de asma.
- Mantén las ventanas y puertas cerradas, tanto en casa como cuando viajes en automóvil.
- Usa una bufanda sobre la boca y la nariz cuando haga frío, para calentar el aire a medida que pase hacia tus pulmones.
- Mantén los medicamentos a la mano para un alivio rápido de los síntomas.
- Lleva contigo un diario donde anotes qué condiciones climáticas parecen provocar síntomas.
Fuente: Medical News Today
