Seguramente muchas veces has utilizado o escuchado la expresión «se me durmió el brazo». Cuando uno o ambos brazos parecen quedarse dormidos, puede sentirse como si se hubieran entumecido. El término médico para esta sensación es parestesia, y una variedad de causas pueden ser las responsables. Algunas son benignas, mientras que otras requieren tratamiento.

Concretamente, la parestesia es una sensación de ardor o picazón que ocurre con mayor frecuencia en las extremidades, las manos y los pies.

La gente también tiende a describir la parestesia como una sensación de hormigueo en la piel o de entumecimiento. Otra descripción común es que la zona se ha quedado dormida.

La parestesia puede presentarse en cualquier momento, sin previo aviso. Aunque la sensación puede resultar incómoda, suele ser indolora.

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Las personas pueden experimentar episodios breves y ocasionales de parestesia durante el sueño sin darse cuenta. Generalmente, la causa es la posición de una persona al dormir. Por ejemplo, el brazo puede quedarse dormido porque una persona se encuentra acostada de una manera que ejerce presión sobre un nervio de la extremidad.

Las posiciones para dormir que pueden ejercer presión sobre los nervios y causar parestesia incluyen las siguientes:

  • Codos extendidos
  • Brazos levantados lejos de los lados
  • Antebrazos colocados con las manos hacia arriba
  • Estar acostado(a) boca abajo con las manos por encima de la cabeza
  • Muñecas que se encuentran flexionadas

Los casos de parestesia posicional suelen ser inofensivos y suelen ocurrir cuando un nervio está bajo presión sostenida. La sensación generalmente desaparece después de que la persona cambia de posición.

 

Fuente: Medical News Today