La salud de las uñas puede ser un reflejo de la salud general de una persona. Las uñas deben ser duras, de color uniforme y sin astillas ni roturas. Los cambios en las uñas pueden deberse a una deficiencia de vitaminas, una lesión o una infección.
Las uñas sanas son brillantes, lisas y de color uniforme. La uña no debe estar rota ni agrietada. El color debajo de la uña (lecho ungueal) debe ser rosado y es posible que tenga una medialuna de color más claro cerca de la cutícula.
Las uñas deben sentirse firmes en todas partes. Las cutículas deben estar intactas y libres de irritación y enrojecimiento.
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La apariencia de las uñas puede cambiar cuando alguien está enfermo o sufrió una lesión. Los cambios pueden presentarse lentamente con el tiempo o pueden suceder de forma abrupta.
Los signos y síntomas de una mala salud de las uñas incluyen:
- Rotura o descamación de las uñas
- Uñas quebradizas
- Decoloración
- Picaduras
- Rayas
- Uñas blandas
- Uñas engrosadas
La aparición de cambios en la piel que rodea la uña también puede indicar cambios en la salud de la misma. La piel puede verse roja e hinchada.
Fuente: Very Well Health
