Los anticuerpos son sustancias producidas por el sistema inmunológico del cuerpo en respuesta a bacterias, virus, hongos, caspa de animales o células cancerosas. Los anticuerpos se adhieren a las sustancias extrañas para que el sistema inmunológico pueda destruirlas.
Cabe destacar que los anticuerpos son específicos para cada tipo de sustancia extraña. Por ejemplo, aquellos producidos en respuesta a una infección por tuberculosis se adhieren solo a la bacteria de la tuberculosis. Los anticuerpos también actúan en reacciones alérgicas. Ocasionalmente, se pueden producir anticuerpos contra tus propios tejidos. A esto se le llama enfermedad autoinmune.
Si tu sistema inmunológico produce niveles bajos de anticuerpos, es posible que tengas una mayor probabilidad de desarrollar infecciones repetidas. Puedes nacer con un sistema inmunológico que produce niveles bajos de anticuerpos, o tu sistema puede producir niveles bajos de anticuerpos en respuesta a ciertas enfermedades, como el cáncer.
Con base en la información anterior, a continuación te mencionamos los cinco tipos principales de anticuerpos:
- IgA. Se encuentran en áreas del cuerpo como la nariz, las vías respiratorias, el tracto digestivo, los oídos, los ojos y la vagina. Los anticuerpos IgA protegen las superficies corporales que están expuestas a sustancias extrañas del exterior. Este tipo de anticuerpo también se encuentra en la saliva, las lágrimas y la sangre. Aproximadamente, del 10% al 15% de los anticuerpos presentes en el cuerpo son anticuerpos IgA. Un pequeño número de personas no produce este tipo de anticuerpos.
- IgG. Se encuentran en todos los fluidos corporales. Son el anticuerpo más pequeño pero más común (75% a 80%) de todos los anticuerpos del cuerpo. Los anticuerpos IgG son muy importantes en la lucha contra las infecciones bacterianas y virales. Asimismo, son el único tipo de anticuerpo que puede atravesar la placenta en una mujer embarazada para ayudar a proteger a su bebé (feto).
- IgM. Son los anticuerpos más grandes. Se encuentran en la sangre y el líquido linfático y son el primer tipo de anticuerpo que se produce en respuesta a una infección. También hacen que otras células del sistema inmunológico destruyan sustancias extrañas. Los anticuerpos IgM son aproximadamente del 5% al 10% de todos los anticuerpos del cuerpo.
- IgE. Los anticuerpos IgE se encuentran en los pulmones, la piel y las membranas mucosas. Hacen que el cuerpo reaccione contra sustancias extrañas como el polen, las esporas de hongos y la caspa de los animales. Están involucrados en reacciones alérgicas a la leche, algunos medicamentos y algunos venenos. Los niveles de anticuerpos IgE suelen ser elevados en personas alérgicas.
- IgD. Los anticuerpos IgD se encuentran en pequeñas cantidades en los tejidos que recubren el abdomen o el pecho. No está claro cómo funcionan.
RECUERDA: Los niveles de cada tipo de anticuerpo pueden brindarle a tu médico información sobre la causa de un problema de salud.