Tu piel tiene pequeños agujeros llamados poros que pueden bloquearse con aceite, bacterias, células muertas de la piel y suciedad. Cuando esto ocurre, puede desarrollar una espinilla, a veces también llamada grano o imperfección.
Si te salen granitos con frecuencia, especialmente varios a la vez repetidamente, es posible que tengas acné. En otras palabras, el acné es la condición de la piel que causa las espinillas.
Cabe resaltar que el acné es muy común. De hecho, diversos estudios estiman que el 9.4 por ciento de las personas en todo el mundo padece acné.
La afección se puede encontrar en casi cualquier parte de tu cuerpo, pero lo más común es que notes brotes en tu:
- Cara y cuello
- Espalda
- Hombros
- Pecho
Conoce más: ¿Cuáles son los factores de riesgo para desarrollar acné?
Las espinillas pueden darle a tu piel una textura áspera y desigual.
Con el acné, también puedes experimentar:
- Decoloración de la piel, incluidos parches o manchas oscuras (hiperpigmentación) y enrojecimiento
- Hinchazón e inflamación
- Dolor y sensibilidad cuando te tocas o cuando no
Asimismo, los brotes de acné pueden causar cicatrices o decoloración en la piel.
RECUERDA: Reventar las espinillas puede aumentar las posibilidades de que queden cicatrices, así que evita apretarlas, no importa lo tentador que sea deshacerse de las espinillas de inmediato.
Fuente: Healthline