La dermatitis dishidrótica es una afección de la piel que se caracteriza por pequeñas ampollas que pican en las palmas, los dedos o las plantas de los pies. Estas progresan a manchas escamosas en el transcurso de varias semanas.
También conocido como eccema dishidrótico o eccema de pies y manos, puede asociarse con dermatitis atópica y alergias estacionales. No existe cura para esta afección, que puede tratarse pero lo más probable es que reaparezca.
La dermatitis dishidrótica suele afectar las palmas de las manos y los costados de los dedos. Asimismo, pueden verse afectadas las plantas de los pies y la zona entre los dedos.
Los síntomas incluyen los siguientes:
- Vesículas profundas (pequeñas protuberancias llenas de líquido)
- Sudor alrededor de las vesículas
- Piel roja e inflamada
- Picazón intensa
- Parches secos, escamosos y agrietados
- Peladura de piel
- Dolor y sensación de ardor
Conoce más: Dermatitis atópica en la cara, ¿cómo la tratan los médicos?
El dolor puede causar dificultad para caminar o utilizar las manos.
La erupción puede comenzar de forma repentina como un grupo de vesículas claras (similares a la tapioca) que aparecen en grupos.
Las sensaciones de ardor y picazón pueden preceder a un brote. En ocasiones, las vesículas pueden mezclarse entre sí y formar grandes ampollas.
Las vesículas se resuelven en tres a cuatro semanas y son reemplazadas por anillos de piel que se descama de 1 a 3 milímetros. Tales parches pueden agrietarse y pelarse antes de que la piel sane finalmente.
El eccema dishidrótico crónico deja la piel enrojecida, engrosada y con grietas profundas, sobre todo si te has rascado repetidamente. También puede causar cambios en las uñas.
Fuente: Very Well Health