Una de las principales causas por las que ocurre el dolor en alguno de los codos es la tendinitis, es decir, la inflamación y lesión de los tendones, que son los tejidos blandos que fijan el músculo al hueso.
Si bien puede ocurrirle a cualquier persona, los deportistas enfrentan mayores probabilidades de lesionarse los tendones en la parte externa del codo. Esa afección se conoce, comúnmente, como codo de tenista.
Conoce más: 3 síndromes de atrapamiento de nervios que afectan el codo
¿Qué más puede provocar dolor de codo?
- Bursitis —inflamación de un cojín lleno de líquido que se encuentra bajo la piel—.
- Artritis.
- Distensión muscular en el codo.
- Infección en el codo.
- Desgarramiento del tendón.
En el caso de los niños pequeños, es frecuentemente el «codo de niñera», que a menudo ocurre cuando alguien les jala el brazo estirado. Si esto pasa, los huesos se estiran y se separan momentáneamente y un ligamento se desliza entre ellos.
El ligamento queda atrapado cuando los huesos intentan regresar a su lugar. Como resultado, el niño normalmente se negará en silencio a usar el brazo, pero a menudo gritará con cualquier intento de doblar o enderezar el codo.
Toma en cuenta que los tratamientos dependen de la causa, pero pueden incluir:
- Fisioterapia.
- Antibióticos y analgésicos.
- Inyecciones de corticosteroides.
- Manipulación.
- Cirugía —último recurso—.
¿Cuándo contactar a un médico?
- Tienes un caso prolongado de tendinitis que no mejora con los cuidados en el hogar.
- El dolor se debe a una lesión directa en el codo.
- Hay una deformidad evidente.
- Tienes fiebre o inflamación y enrojecimiento del codo.
- El codo está inmóvil y no lo puedes enderezar o doblar.
Visita a un profesional de la salud si tienes un caso prolongado de tendinitis que no mejora con los cuidados en el hogar o si el dolor se debe a una lesión directa en el codo.
Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos