En la fibromialgia, los mareos suelen aparecer cuando la persona se levanta por primera vez. Es similar a la sensación de «subidón de cabeza» cuando te levantas demasiado rápido, solo que puede presentarse cada vez que pasas de estar acostado(a) o sentado(a) a levantarte. La aparición repentina de mareos puede hacer que la persona se tambalee, o incluso puede hacer que se caiga o se desmaye.
De acuerdo con un estudio del año 2017, los mareos y los desmayos en la fibromialgia pueden estar relacionados con un subgrupo particular. Además de los mareos y los desmayos, dicho subgrupo también tuvo los niveles más elevados de dolor, así como una variedad de síntomas y afecciones superpuestas que incluyen disfunción cognitiva («fibroniebla»), vejiga irritable, vulvodinia y síndrome de piernas inquietas.
Las investigaciones sugieren que dicho síntoma se debe a una disfunción del sistema nervioso autónomo (SNA), lo que se denomina disautonomía. El SNA participa en muchas funciones críticas del cuerpo, incluyendo la frecuencia cardíaca, la presión arterial, la frecuencia respiratoria, la temperatura corporal, el metabolismo y la digestión.
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Los mareos resultantes de la disautonomía pueden denominarse intolerancia ortostática, hipotensión mediada neuralmente o síndrome de taquicardia ortostática postural (STOP). Básicamente, todo lo anterior significa que el corazón y el cerebro no se comunican de forma adecuada entre sí.
Lo que debería suceder es que cuando te levantes después de estar acostado(a) o sentado(a), el SNA aumente tu presión arterial para luchar contra la gravedad y mantener un suministro suficiente de sangre en tu cerebro. Con la disautonomía, esto no sucede como debería. En su lugar, la presión arterial puede bajar cuando estás de pie y el resultado es mareos o aturdimiento. En el STOP, la frecuencia cardíaca se acelera a medida que cae la presión arterial.
Los mareos pueden estar asociados con palpitaciones cardíacas, visión borrosa, aumento del pulso, dolor en el pecho y un tipo de desmayo llamado síncope vasovagal.
No obstante, no todas las personas con mareos relacionados con la fibromialgia se desmayan. En un estudio del año 2008, los investigadores hallaron que los mareos y las palpitaciones eran más comunes que los desmayos. También encontraron que el STOP fue uno de los síntomas de fibromialgia más comunes que observaron durante las pruebas de mesa basculante, que miden la respuesta a los cambios de posición.
Fuente: Very Well Health