Muchas personas experimentan rigidez en las articulaciones (o rigidez articular) justo después de despertarse. Acostarse durante varias horas para dormir reduce la cantidad de líquido, lo que dificulta el movimiento de las articulaciones a primera hora de la mañana.
La rigidez articular puede ser leve y solo afectar tu movilidad durante un breve período de tiempo cada mañana o después de estar sentado(a) durante largos períodos de tiempo. La rigidez también puede ser más severa y afectar tus movimientos corporales.
En algunos casos, el dolor y la inflamación acompañan a la rigidez de las articulaciones. Esto puede hacer que caminar, pararse o poner peso sobre las articulaciones te resulte doloroso.
Cabe destacar que no todas las articulaciones rígidas son el resultado de la edad. Muchas otras condiciones pueden causar rigidez articular, como por ejemplo la artritis, el lupus (una enfermedad autoinmune) y la bursitis (una condición que afecta las pequeñas bolsas rellenas de líquido [bolsas sinoviales] que brindan amortiguación a los huesos, tendones y músculos alrededor de las articulaciones). Además, los factores del estilo de vida, incluyendo la dieta y el control del peso, pueden afectar la movilidad de tus articulaciones.
Si deseas saber más sobre la rigidez articular y cómo tratarla, consulta a tu médico.
Fuente: Healthline