La gota es un término general para una variedad de condiciones causadas por una acumulación de ácido úrico. Dicha acumulación suele afectar a los pies.
Si tienes gota, probablemente sentirás hinchazón y dolor en las articulaciones del pie, especialmente en el dedo gordo del pie. El dolor repentino e intenso, o los ataques de gota, pueden hacer que se sienta como si tu pie estuviera en llamas.
Si no se trata, la gota eventualmente puede provocar artritis gotosa, que es una forma más grave de artritis. Esta condición dolorosa puede dejar tu articulación dañada e hinchada de manera permanente.
El plan de tratamiento que recomiende tu médico dependerá de la etapa y la gravedad de tu gota.
Los medicamentos para tratar la afección funcionan de una de dos maneras: alivian el dolor y reducen la inflamación, o previenen futuros ataques de gota al reducir los niveles de ácido úrico.
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Los medicamentos para aliviar el dolor de gota incluyen:
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- Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como aspirina, ibuprofeno y naproxeno.
- Colchicina
- Corticosteroides
- Medicamentos que previenen los ataques de gota, como los inhibidores de la xantina oxidasa, (p.ej. alopurinol y febuxostat)
- Probenecid, un agente que aumenta la excreción del ácido úrico por la orina
Junto con los medicamentos, tu médico podría recomendarte realizar cambios en tu estilo de vida, lo que ayudará a controlar tus síntomas y reducir el riesgo de futuros ataques de gota. Por ejemplo, tu médico podría alentarte a:
- Reducir tu consumo de alcohol, si bebes
- Bajar de peso, si tiene sobrepeso
- Dejar de fumar, si fumas
Además, algunas terapias complementarias también se han mostrado prometedoras.
Si deseas saber más sobre la gota y cómo tratarla, consulta a tu médico.
Fuente: Healthline