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1. Respiración con los labios fruncidos

Este tipo de respiración ayuda a la persona a respirar lenta, profunda y de manera más intencionada. Es una técnica de respiración simple que ayuda a que las respiraciones profundas sean más lentas e intencionales.

Las personas que padecen enfermedades pulmonares como enfisema y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) utilizan esta técnica para controlar la dificultad para respirar y aliviar la ansiedad.

  • Siéntate en una silla o en el suelo en una posición cómoda.
  • Mantén el cuello y los hombros relajados.
  • Con la boca cerrada y los labios relajados, inhala lentamente por las fosas nasales durante 2 segundos.
  • Frunce los labios como si estuvieras dando un beso y exhala por la boca de manera lenta y constante.

Conoce más: La importancia de los ejercicios de respiración en pacientes con EPOC

2. Respiración con frecuencia de resonancia

También llamada respiración coherente, esta técnica puede ayudar a reducir la ansiedad y permitir que una persona entre en un estado más relajado.

  • Mientras estás acostado(a) con los ojos cerrados, inhala por la nariz con la boca cerrada y cuenta hasta seis. Los pulmones no deben estar demasiado llenos.
  • Exhala lenta y suavemente contando hasta seis sin forzar la respiración.
  • Continúa según sea necesario por hasta 10 minutos.
  • Después del ejercicio, el individuo debe permanecer quieto y concentrarse en cómo se siente el cuerpo durante un par de minutos.

Aunque la frecuencia respiratoria de resonancia varía entre los individuos, el rango típico es de 4.5 a 7 respiraciones por minuto.

 

Fuente: Medical News Today